Te lo digo aquí, lejos de tus complejos. Donde ni siquiera tus dudas alcancen y esa batalla diaria que sientes dentro guarda silencio, por una vez. Te lo digo aquí para que no se lo lleve el viento y tengas siempre a dónde volver para leer de nuevo la única verdad que nunca muere: eres preciosa. Así, sin más.
Eres tan única e increíble que el mundo no lo entiende, no asume que pueda haber alguien así entre tanta gente que no entiende que lo bonito está en lo diferente. Que tu sonrisa brilla más que cualquiera de sus vidas porque es lo único real que destaca por encima de todas sus fachadas. Y ese pelo rebelde al que nunca ganas, no lo pierdas, pues de su rebeldía nace todo lo que te hace ser como eres.
Preciosa, no hay más. No te das cuenta que lo bonito no está en los ojos, sino en esa mirada tuya capaz de frenar los trenes del tiempo. Que tu risa baña de luz el día más gris y calla la luna cuando te ve, no vaya a ser que te dé por brillar más que ella y hagas del cielo tu hogar. Qué digo, si hace tiempo que tienes guardado en el firmamento un pedazo de cielo con tu nombre, esperando el día en que te des cuenta de que tu luz está a la altura de la de cualquiera de las estrellas que miras con envidia cuando alzas la vista.
Así que basta ya de complejos e inseguridades. Eres preciosa y no te das ni cuenta. Deja de contar uno a uno los defectos que te grita el espejo y empieza a contar de diez en diez las virtudes de ser quien eres.
Y sonríe, tienes una sonrisa tan bonita que es un delito que la guardes para ti. Sonríe y sé feliz contigo misma, ama cada uno de los “defectos” que te hacen dudar y deja que las opiniones de todos los demás resbalen en esa coraza que llevas desde hace tanto tiempo.
Eres preciosa, no lo olvides. Y no porque lo diga yo, sino porque en el fondo sabes que todos esos complejos nacen del resto de la sociedad y no realmente de ti. Así que deja el mundo a un lado y céntrate en ti y en esa belleza tuya que es única y que nadie más tiene.
Comments